Si hay algún guionista al que inmediatamente relacionamos con el personaje de John Constantine ese es, sin ninguna duda, el inglés Jamie Delano. Creado por Alan Moore como personaje secundario en su inolvidable etapa en La Cosa del Pantano, el personaje de John Constantine ganó el favor del público y de los editores y consiguió su propia cabecera (Hellblazer) en 1988 de la mano del escritor Jamie Delano (Northampton, 1954). Recomendado para el puesto por el propio Moore, Delano escribió durante tres años, y casi de manera ininterrumpida, una de las mejores etapas del personaje, hasta que abandonó la serie en el número 40 dando el relevo a otro escritor de las islas, el irlandés Garth Ennis.
Años más tarde Delano volvería a escribir las aventuras de Constantine en un par de ocasiones más, en el número 84 de Hellblazer, en la miniserie de dos números The Horrorist (1995) junto a David Lloyd (aún inédita en nuestro país) y en la miniserie de cuatro números Bad Blood (2000), traducida como Mala Sangre y publicada recientemente en nuestro país de la mano de Planeta en un único tomo.
En Mala Sangre. Una comedia de restauración, Delano sitúa la historia en el año 2025 en Nueva Londres, capital de la República Moderna del Amor, donde un cínico y gruñón John Constantine septuagenario, sobrevive a duras penas en un futuro donde Lady Di se ha convertido en una deidad con culto adorador propio, las Diánicas, y la línea sucesoria monárquica está al borde de la desaparición. Ante la inminente muerte del rey Carlos III, la línea de sangre Real está en peligro hasta que entra en escena Dolly, una joven doctora paquistaní amiga de Constantine, que será invitada a protagonizar la serie televisiva líder de audiencia Estirpe, en la que veremos como ella podría ser la heredera bastarda del trono. A raíz de la emisión de la serie, todo se complicará y Dolly y Constantine, junto a su inseparable amigo Chas, se verán envueltos en tramas políticas, complots y sangrientos enfrentamientos entre republicanos y monárquicos.
El guión firmado por Delano, una comedia con un marcado humor negro y gamberro, se aleja bastante de la línea de aquellas historias de terror sobrenatural que firmara hace años para la serie Hellblazer y uno tiene la impresión, a pesar de lo que reza el título de la portada, de no estar leyendo un tebeo protagonizado por John Constantine. No obstante, la historia como comedia negra con críticas a la sociedad, a la prensa y a la monarquía británicas incluidas, entretiene y funciona bastante bien, tiene algunos chistes graciosos y otros no tanto, sin embargo se echa de menos a un Constantine algo más sobrio, y es que en ocasiones el guión recuerda a uno de los desquiciados guiones marca de la casa de Garth Ennis.
En cuanto a la parte gráfica de la obra, el dibujante Philip Bond (Mata a tu novio, Pop! London, Vimanarama), ayudado en las tintas por el también dibujante Warren Pleece (Deadenders, Invisibles), ambos con un estilo a medio camino entre lo realista y lo caricaturesco, se revelan como la elección perfecta para plasmar en viñetas el guión en tono de comedia propuesto por Delano.
En resumen, éste especial de Hellblazer es una buena lectura que quizás deje un regustillo agridulce en algunos lectores que pensarán que este no es el Constantine que conocen de toda la vida, pero que gustará a aquellos lectores que busquen una historia divertida en la línea de algunas historias escritas por Garth Ennis.
La edición de Planeta está bastante bien, tiene un precio bastante ajustado y además reproduce las cuatro portadas de la miniserie original, "pintadas" para la ocasión por Sean Phillips.
Hellblazer Especial. Mala Sangre. Una comedia de restauración.Años más tarde Delano volvería a escribir las aventuras de Constantine en un par de ocasiones más, en el número 84 de Hellblazer, en la miniserie de dos números The Horrorist (1995) junto a David Lloyd (aún inédita en nuestro país) y en la miniserie de cuatro números Bad Blood (2000), traducida como Mala Sangre y publicada recientemente en nuestro país de la mano de Planeta en un único tomo.
En Mala Sangre. Una comedia de restauración, Delano sitúa la historia en el año 2025 en Nueva Londres, capital de la República Moderna del Amor, donde un cínico y gruñón John Constantine septuagenario, sobrevive a duras penas en un futuro donde Lady Di se ha convertido en una deidad con culto adorador propio, las Diánicas, y la línea sucesoria monárquica está al borde de la desaparición. Ante la inminente muerte del rey Carlos III, la línea de sangre Real está en peligro hasta que entra en escena Dolly, una joven doctora paquistaní amiga de Constantine, que será invitada a protagonizar la serie televisiva líder de audiencia Estirpe, en la que veremos como ella podría ser la heredera bastarda del trono. A raíz de la emisión de la serie, todo se complicará y Dolly y Constantine, junto a su inseparable amigo Chas, se verán envueltos en tramas políticas, complots y sangrientos enfrentamientos entre republicanos y monárquicos.
El guión firmado por Delano, una comedia con un marcado humor negro y gamberro, se aleja bastante de la línea de aquellas historias de terror sobrenatural que firmara hace años para la serie Hellblazer y uno tiene la impresión, a pesar de lo que reza el título de la portada, de no estar leyendo un tebeo protagonizado por John Constantine. No obstante, la historia como comedia negra con críticas a la sociedad, a la prensa y a la monarquía británicas incluidas, entretiene y funciona bastante bien, tiene algunos chistes graciosos y otros no tanto, sin embargo se echa de menos a un Constantine algo más sobrio, y es que en ocasiones el guión recuerda a uno de los desquiciados guiones marca de la casa de Garth Ennis.
En cuanto a la parte gráfica de la obra, el dibujante Philip Bond (Mata a tu novio, Pop! London, Vimanarama), ayudado en las tintas por el también dibujante Warren Pleece (Deadenders, Invisibles), ambos con un estilo a medio camino entre lo realista y lo caricaturesco, se revelan como la elección perfecta para plasmar en viñetas el guión en tono de comedia propuesto por Delano.
En resumen, éste especial de Hellblazer es una buena lectura que quizás deje un regustillo agridulce en algunos lectores que pensarán que este no es el Constantine que conocen de toda la vida, pero que gustará a aquellos lectores que busquen una historia divertida en la línea de algunas historias escritas por Garth Ennis.
La edición de Planeta está bastante bien, tiene un precio bastante ajustado y además reproduce las cuatro portadas de la miniserie original, "pintadas" para la ocasión por Sean Phillips.
(Hellblazer Special Bad Blood 1-4)
Jamie Delano, Philip Bond y Warren Pleece.
Planeta DeAgostini.
96 págs. - Color - 7,95 €. Rústica. Número único. Junio 2007.
3 comentarios:
Aún lo tengo por leer... No sé, Bond no me convence mucho.
¿Te has fijado en la errata del lomo? ;-)
A mí, Bond me encanta, pero entiendo que no sea del gusto de muchos.
Sobre la errata... pues ni me había dado cuenta... porque me lo habías dicho tú que si no ni me entero :D
Tampoco me entusisma Bond. Acabo de comprarlo...
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